Cómo almacenar tus neumáticos

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A estas alturas ya está comúnmente aceptado que lo más inteligente es disponer de un juego de ruedas de invierno y otro de verano. Sin embargo, para muchos conductores el problema es cómo almacenar los neumáticos sin que se degraden durante el tiempo que están guardados e inactivos.

Para empezar, tenemos que poner de manifiesto una obviedad: que no todo el mundo dispone de un espacio con suficiente amplitud para guardarlos. Y además, no se trata solo de guardar, en este asunto, el ‘qué’ es tan importante como el ‘cómo’.

En consecuencia, lo que nos conviene es encontrar un taller de confianza en el que guardar las ruedas de verano durante la época invernal y las de inverno durante el periodo estival.

Cómo guardar los distintos tipos de neumáticos

Los distintos tipos de neumáticos no se pueden guardar de cualquier manera, hay que mantenerlos alejados de generadores eléctricos y tuberías de agua caliente. Tampoco deben permanecer en espacios en los que haya manchas de gasoil, gasolina, aceite u otras sustancias químicas. Son fluidos nocivos para las gomas que pueden provocar un grave e irreversible deterioro.

Cinco reglas para almacenar los neumáticos:

1.- Guardarlos en un entorno suficientemente bien ventilado y seco, con una temperatura suave, donde no haga calor ni frío. Sin exposición directa a la luz del sol.

2.- Deben permanecer lejos de hidrocarburos, disolventes o sustancias químicas.

3.- Bajo ningún concepto pueden entrar en contacto con objetos de metal o maderas puntiagudas.

4.- Han de permanecer lejos de fuentes de calor o de objetos que puedan originar descargar eléctricas o provocar chispas. No les conviene la cercanía a objetos incandescentes.

5.- Tampoco la proximidad a fuentes de ozono como motores eléctricos, transformadores o equipos de soldadura.

No se trata solo de almacenar los neumáticos, lo importante es cuidarlos bien. Para ello, el consejo es girar los neumáticos cada cierto tiempo e invertir el orden en el que se encuentran para evitar que aparezcan malformaciones o que queden aplastados debajo de objetos muy pesados. En los talleres hay que saber cambiar una rueda de posición.

Tan importante como almacenar una rueda es que los accesorios pasen el periodo de descanso guardados con su embalaje original y sobre superficies en las que no haya riesgo de que se produzca algún tipo de corte o perforación.

Cambiar una rueda de posición

La manipulación debe realizarse con equipos e instrumentos que no provoquen ningún daño sobre las ruedas, utilizando guantes y la ropa recomendable para esta tarea.

Cuando sea necesario almacenar los neumáticos durante muchos meses, lo mejor es colocarlos de forma vertical en estanterías que se encuentren, al menos, a 10 centímetros del suelo. De lo que se trata es de conservarlos de la mejor manera posible para que no sufran ningún tipo de daño durante el periodo de hibernación.