¿Correrías con las zapatillas de otra persona? ¿Utilizarías una dentadura postiza usada? ¿Recurrirías a un cirujano low cost para que te operase? La respuesta a todas estas preguntas parece lógica, sin embargo, todavía hay personas que ponen neumáticos de segunda mano en sus vehículos sin conocer el peligro y los problemas que pueden generarle. Este post explica cuáles son y por qué debemos evitar su uso siempre.
¿Por qué no comprar neumáticos de segunda mano?
- Desconoces su procedencia. A menos que conozcas muy estrechamente al anterior propietario y tengas una fe absoluta en su palabra (y ni aún así), no existe manera de conocer si el estado del neumático es el más idóneo. Una incertidumbre que no conviene que tengas.
- Existencia de desperfectos ocultos. Puede que a simple vista observes que el estado de las gomas parezca correcto, pero la estructura interna puede estar dañada sin dar señales aparentes. Un ejemplo sería si el neumático ha recibido un llantazo que haya podido afectar al talón.
- Vida útil menor. Es lógico que un neumático gastado va a durar menos que si lo compras nuevo. A mayor uso, menor dibujo y menor durabilidad.
¿Qué problemas puede causarnos un neumático de segunda mano en carretera?
La crisis económica sufrida en los últimos años ha aumentado el uso de estas ruedas. Son más económicas y están al alcance de personas con un menor poder adquisitivo que tienen la necesidad de cambiar las gomas de su coche al precio más bajo.
Lo que no suelen tener en cuenta son los riesgos que están asumiendo con los neumáticos de segunda mano, tanto para ellos mismos como para el resto de conductores. Este reciclado de ruedas supone un peligro ya que gran parte de estas ruedas no cumplen con las condiciones óptimas para garantizar la seguridad vial ya que ofrecen una mayor distancia de frenado, tienen peor rendimiento, riesgo de aquaplaning, menor resistencia y son más propensas a sufrir pinchazos, entre otros problemas.
Evita el uso de neumáticos usados
Esta es la mejor recomendación que podemos hacerte. Si quieres reducir la probabilidad de tener un accidente evita comprar neumáticos de segunda mano y emplea un comparador de neumáticos de confianza para adquirir los que mejor se adapten a las necesidades de tu coche. Son el único punto de apoyo de tu vehículo con la carretera por lo que una buena elección y un buen mantenimiento de las ruedas son cruciales para mejorar tu seguridad en carretera.